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La falta de tiempo es una de las principales razones por las que muchas mujeres no logramos entrenar con la frecuencia deseada y necesaria.
El trabajo, la ocupación con los hijos, las extraescolares, el cuidado de la casa, el cuidado de los mayores, y un largo etcétera, que hace que toda mujer sienta la presión y la obligación, solo por el hecho de ser mujer, de tener que llegar a todo, siendo así mujer ‘multitasking’.
Y es de esta manera en la que en ocasiones llegamos a un punto de saturación vital, en la cual pensamos que no somos válidas o que no lo estamos haciendo lo suficientemente bien.
Y ahí es donde entra nuestro machaque emocional, donde caemos en desidia y baja autoestima, y donde la vida en ocasiones nos pesa. Pero como debemos seguir con el día a día en modo multitarea, entramos en un bucle llamado ‘piloto automático’ del cual nos cuesta ver la salida.
Desde Zevras nos gustaría acompañarte en el comienzo de ir soltando lastres, creencias limitantes y obligaciones, que en ocasiones no nos pertenecen.
Aportarte los consejos básicos que a nosotras nos han servido para comenzar a vivir una vida más energética a través del ejercicio físico.
Vital a la hora de encontrarnos mejor física y emocionalmente.
Vital a la hora de querer hacer cosas y poder hacerlas.
Vital a la hora de sentirnos capaces de muchas cosas.
Y si encima lo hacemos acompañadas de otras mujeres con las mismas necesidades, nos sentiremos mucho más arropadas y comprendidas.
Son todos motivos, como muchos otros, por los que debemos encontrar ese hueco en nuestra agenda, ese que en la medida de lo posible no debamos saltarnos, pensando siempre en lo que nos aporta para el resto de nuestras tareas del día a día.
Pero como mencioné antes, también hay que soltar, en ocasiones pedir ayuda y cooperación, y repartir tareas, para priorizar nuestra salud, que a su vez nos ayudará estar más planificadas y con más fuerza y energía.
No te culpes tampoco si comienzas a entrenar y en ocasiones, por circunstancias no puedes acudir a tu momento de entrenamiento y autocuidado. No pasa nada, no añadas más ruido a tu cabeza.
Esos días te aconsejo que en la medida de lo posible camines a los sitios que tengas que ir, subas escaleras en vez de coger el ascensor y tengas lo más activo que puedas.
¡Siempre es mejor poco que nada! Recuerda esto último.
Te invito a nuestro espacio Zevras, donde cada mujer está lidiando con su día a día, pero también donde juntas, nuestras vidas son mejores.
¡Comienza HOY a priorizarte!
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